Por que Habana ?
Cuantas veces con orgullo has proclamado ¨yo soy de La Habana¨ o ,desbordando entusiasmo has anunciado tu viaje a la emblemática capital cubana. La Habana, siempre atractiva ciudad paradisiaca que acoge con traje de gala a quien la visita y reserva sus maneras a veces incomprensibles y complejas para los nativos, desdoblándose en dos realidades completamente diferentes, como una madre que trata dulcemente a los visitantes pero reserva para sus hijos el amor más férreo.
La Habana es la magia hecha ciudad pero cuanto sabes realmente sobre su nombre.. por que se llama Habana ?
Existen varias hipótesis sobre el nombre de la ciudad real y maravillosa de Carpentier, pero la más acertada es que nuestra urbe toma su nombre del taíno Habaguanex y su cónyuge.
El Cacique Habaguanex gobernaba un extenso territorio, residía en un pueblo de la costa norte occidental y era esposo de la india Habana ,quien inspiró la majestuosa escultura de la fuente de la india.
El gran cacique rescató y cuidó por dos años a tres náufragos españoles, protegiéndolos de los otros jefes indios que demandaban sus cabezas y los entregó sanos y salvos a Pánfilo de Narváez y Fray Bartolomé de las Casas , a su llegada a la isla en 1512.
A su vez el asentamiento fundado en la costa sur y descrito como¨ un gran batey rodeado de bohíos en un llano fértil y ancho¨, fue nombrado ¨San Cristóbal¨ en alusión al calendario Juliano alrededor de 1514, a los pocos años este asentimiento fue trasladándose hacia los dominios del cacique Habaguanex, hasta que finalmente en 1519 La Habana se convirtió en Pueblo Nuevo fusionando el nombre de los dos sitios que en un momento determinado existieron simultáneamente.
Bautizada desde entonces San Cristóbal de la Habana, la urbe comenzó su crecimiento indetenible hasta convertirse en el tesoro que es hoy ,y como tal fue galardonada una de las sietes ciudades maravillas del mundo, y su Centro Histórico resistente al tiempo, fue declarado por la Unesco Patrimonio de la Humanidad.
Ciudad Maravilla multidimensional, según ojos de viajeros o nacionales, pero siempre mezcla perfecta entre historia, arte e idiosincrasia que se fusiona con aire tropical proveniente del mar que le rinde pleitesía eterna desde su emblemático malecón.
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