El mar, en su poderío indomable, devoraba ávido todos los naufragios que sucumbían e sus fauces, indefensos, digeridos poco a poco en su estómago de sal. La escultura, desde que el primer hombre talló la piedra por allá por los albores del tiempo, estuvo vagando por el mundo, llenando las mentes de los artistas, escapando a través de sus manos, convirtiéndose en las formas más iluminadas, que arrancaban suspiros a todo aquel que posara sus ojos sobre ellas. Ambos eran  poderosos e inspiradores, pero estaban solos, ignorantes de la perfección que podían traer a la vida. Así fue hasta que nació Jason de Caires Taylor. 

Vino a la vida en 1974 en el Reino Unido, creció amando el arte y al mar, practicaba el submarinismo  desde los 18 años y fue graduado de Camberwell College Art, London Institute, a los 24, especializado en escultura y cerámica. Obsesionado con el azul envolvente de las profundidades, encontró, lo que tantos han fallado en hallar, una forma de manifestar el arte y ayudar al ambiente a la vez.

 En 2006 realizó su primera escultura submarina, la llamó " La evolución silenciosa", cambiando para

siempre el concepto de arte y amor por la naturaleza y el ambiente. Desde entonces Caines es conocido por crear impresionantes instalaciones en el fondo marino, que además de quitarle el aliento a todo el que tiene la suerte de observarlas benefician a la vida submarina.

Las esculturas del artista no solo transportan actividades cotidianas altamente terrestres, a entornos marítimos, si no que lejos de contaminar o destruir el ambiente marino, crean espacios paras los colares y la fauna del océano, beneficiando altamente el ecosistema del poderoso océano que tan afectado se ha visto por el paso destructor de los humanos y su estela de contaminación, irrespetuosa y letal. 


Los corales crecen en los rostros de las obras de Caines, los peces nadan entre sus instalaciones impresionantes y la vida marina se fusiona con la escultura, concibiendo una de las manifestaciones artísticas más hermosas. Un arte que une  la belleza con el respeto y el amor hacia todos los habitantes del océano, tratándolo como el respeto y la pulcridad que se merece, como si fuese un museo. 

 Los jardines submarinos creados por Caines, han revolucionado el arte e iniciado una ola de conciencia que alcanza a muchos. Los corales albergan la mayor biodiversidad de todos los ecosistemas del mundo, y debido a su proximidad a la costa, el aumento de la temperatura de los océanos y el cambio de sus características químicas, se han convertido en el ecosistema más amenazado de la Tierra. 


Caines y sus esculturas, llegaron para cambiar eso, sumergiendo en el mar sus inertes humanos de hormigón, para que este lentamente los traiga a la vida, en un espectáculo sublime de peces y corales que le infunde vida a la muerte. 
Continue Reading